Porque hoy nada ni nadie me arruina el día, ¡cómo que no!, y eso que está la cosa calentita. ¡Manda narices! Eso mismo pensé cuando detrás de mil capas de maquillaje y colorete pude descubrir la esbelta figura de la tonadillera por excelencia acaparando la portada de una de las principales revistas del corazón. Es indignante, vomitivo y hasta ruin que con cheque por medio hable hasta el Tato. Sapos y salamandras contra el papel cuché, más de un desprecio y algún que otro alarido se esfuman entre las tinieblas malayas cuando hay ceros por medio. ¡Menuda vergüenza! Para que después digan que los paparazzi la tienen hasta el… moño. Y no, aún no se me ha disparado la tensión, al fin y al cabo, cada cual hace lo que quiere con su vida, pero que después no venga pidiendo clemencia.
El que si ha tenido que “arrodillarse hasta ante el Pontífice” ha sido el gigante informático norteamericano Microsoft, y es que, ni siquiera la aparente generosidad de su jefe les ha librado de sus grandes pecados. La razón: un nuevo caso de racismo. ¡Maldita intolerancia! La división polaca de la empresa tuvo la brillante idea de sustituir a un hombre de color por uno blanco en su última campaña publicitaria. Pero son tan cutres que un corta y pega les bastó para decapitar al protagonista real de este anuncio. ¿Dónde estaba el problema? ¿No hay negros en Polonia? ¿O es que allá arriba no son considerados ciudadanos?
Expira, inspira. Y es que los malos humos asfixian hasta al más sano. Un, dos, tres, yo me calmaré todos lo veréis, imposible ante titulares como los aparecidos hoy en la prensa. Cerca de seis millones de personas en todo el mundo morirán en 2010 a consecuencia del tabaco. Cáncer, enfermedad cardíaca, enfisema y otras dolencias son las principales causas de mortalidad derivados de su consumo, según ha publicado en su último informe la Sociedad Estadounidense del Cáncer. ¿Acaso vivimos en un planeta de suicidas? Quizás sea la respuesta más coherente.
Hoy nada me dispara la tensión
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A ver, aver.. por dónde empiezo. Primero, respecto a lo del papel cuché, yo defiendo mi idea de ir a Marbella a esperar que salga la famosa de turno e bolas, vender la foto y que me den una pasta (A Dios pongo por testigo que así no pasaré hambre y que lo haré, me iré a ver si unas horas de espera me solucionan el sueldo de unos meses... qué ilusa). Por eso yo lo del papel cuché lo veo bien.
Lo del racismo, sin comentarios.
Lo del tabaco, pues allá ellos, si es que lo que tiene el cementerio además de muertos son gilipoyas, con perdón, pero gilipoyas: fumadores, gente que no se puso el cinturón, que no respetó un límite de velocidad, que no fue a esa revisión del médico cuando debía, o que se negó a dar a tiempo su cartera a quel yonqui. Lo que digo: además de muertos, gilipoyas.
Si, si, si yo no ataco al trabajo de los periodistas del corazón. Solo digo que me da mucho coraje que famosos como esta cantante huya de la prensa, no quiera hablar de su vida privada, y cuando le viene en gana -y cheque por medio- conceda una entrevista de 10 páginas. Después no reclames que te dejen en paz, ya has vendido tu vida
Por cierto, mi buen humor se debía a la ansiada conquista de esa a la que llaman L