Quizás se piensen que somos gilipollas, y perdónenme la expresión, pero pronto entenderán el por qué. Y es que no existe otra respuesta ante la gran incógnita del día. Estamos hartos, al menos a título personal, de que nos bombardeen una y otra vez con recomendaciones del tipo apretarse el cinturón, congelación de salarios y subida impuestos. Debemos arrimar el hombro, es cuestión de todos. ¿De verdad piensan que somos gilipollas?
Crisis, crisis y más crisis. Y lo peor está por llegar. Señores, sospecho que alguien me engaña, bueno, nos toma el pelo. Cuando más de la mitad del país debe contar cada céntimo para llegar a fin de mes, hay quienes defecan sobre billetes de cien euros. Qué poca vergüenza. ¿Intensifiquemos ese doble juego al estilo Robin Hood, señor Zapatero!
Y es que en mitad de esta coyuntura económica, nuestro país ha engordado su particular lista de ricos, y no en uno o dos, en 16.000 personas. ¡Toma del frasco, Carrasco! Aquí más de uno está haciéndose Las Grecas. En total, España cuenta con 143.000 ricos frente a los más de cuatro millones de parados. ¡Qué mal está repartido el parné!
Pues visto lo visto, señores honorables pudientes vayan aflojando la guita que la crisis es problema de todos. Así, ea, a arrimar el hombro se ha dicho.
Sospecho que alguien me engaña
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pues a mi que no me miren!!!
Jijiji,quién sabe, quién sabe. Si al final siempre los perjudicados somos los mismos...